Nunca te des por vencida
¿Cuántas veces has deseado conseguir algo y cuando estabas por lograrlo las cosas se
complicaron? Seguramente te ha sucedido en repetidas ocasiones. Quien diga que no ha pasado por estos caminos sinuosos de la vida seguramente estará mintiendo. Es normal atravesar momentos de frustración y esas ganas profundas de abandonarlo todo, dedicarnos a otra cosa, y pasar de página.
Si bien es normal que ante situaciones desalentadoras queramos tirar la toalla, es allí, en aquellos momentos en que la vida nos pone a prueba, y cuando más debemos sacar a relucir nuestra fortaleza. No debemos olvidar que la actitud que tomemos frente a los problemas será lo que marcará la diferencia y nos hará llegar al objetivo que queramos alcanzar.
Ante un conflicto tenemos dos alternativas: luchar por nuestro proyecto o darnos por vencidas. Cuando optamos por el camino fácil del abandono de nuestros sueños, indudablemente nos vamos a sentir invadidas por la sensación de fracaso y estancamiento. Empoderarnos y luchar por nuestros sueños nos dará las fuerzas necesarias para seguir adelante hasta obtener la recompensa. Sabernos capaces de conseguir lo que nos proponemos nos motiva, inspira y nos hace fuertes ante las adversidades.
Tips para superar los momentos en los que crees que abandonar es la única
alternativa:
Motívate: recuérdate a cada instante que tú puedes, que gracias a tu esfuerzo ya falta
menos para que logres alcanzar tus sueños, que eres una mujer fuerte y capaz de
conseguir todo lo que te propongas
Inspírate: Aférrate a la célebre frase de Martin Luther King que dice: “Si no puedes volar,
entonces corre. Si no puedes correr, entonces camina. Si no puedes caminar, entonces
arrástrate. Pero sea lo que sea, siempre continúa hacia adelante”. Pero jamás bajes los
brazos, nunca te rindas.
No permitas desalentarte por los días o momentos malos: Siempre estarán aquellos
momentos en donde las energías y las ganas no son las mismas que tenías al comienzo.
Estas barreras y limitaciones que nos pone nuestra mente son los principales obstáculos
que deberemos sortear. Tal vez, en estos momentos en los que sientes que estás
retorciendo y te lleven a frustraciones que te hagan tirar todo por la borda; debes
aprovecharlo para que, desde unos pasos más atrás, tomes el impulso que te catapulte al
éxito.
Días malos: Existirán momentos, días y semanas que podrían conspirar contra nuestros
proyectos, sin embargo, esto no significa que ya esté todo perdido; por el contrario, podría
ser el momento en el cual puedes darle un respiro a tu cabeza para volver a encaminar tus
anhelos.
Utiliza la fuerza de la mente: Pensar en positivo hará que el poder que ejerza la mente
sobre nuestros deseos, nos lleve a materializar todos nuestros sueños. Rodéate de gente positiva, segura de sí misma y triunfadora.
Crea una estrategia de trabajo: Es importante que los objetivos que te establezcas hasta
alcanzar tu meta sean de corto plazo. De esta manera, irás consiguiendo el ánimo
necesario hasta llegar a cumplir con la realización de tu proyecto.
Reconoce tus logros: Siempre se consecuente con lo lejos que has llegado: mira hacia
atrás y visualiza lo lejos que estas del punto de partida; ¿se siente bien, no es cierto?
No olvides que la vida trata de eso: perseguir los sueños, luchar por aquello que deseamos,
caernos, levantarnos y aprender de cada uno de nuestros errores teniendo la fortaleza y el
orgullo de nunca darnos por vencidas.